Las mujeres que damos a luz por cesárea, solemos olvidarnos de nosotras mismas debido a que nuestros bebés nos necesitan en todo momento y pasamos por alto que acabamos de ser sometidas a una cirugía que requiere cuidados posteriores.
La cesárea puede llegar a tardar en cicatrizar un par de semanas, mismas en las que deseamos sentirnos bien al instante para poder atender a nuestro bebé, para ello, necesitas cuidarte muchísimo durante los primeros días, aquí te compartimos estos consejos para que tú recuperación sea más rápido de lo esperado:
Olvida los esfuerzos
Puede que unos días después de estar en casa, te sientas mucho mejor, más fuerte y lista para volver a tu ritmo de vida habitual. Por favor no te confíes, descansa el mayor tiempo que te sea posible de actividades como manejar, cargar cosas pesadas, subir y bajar escaleras, incluso ciertas actividades como el baño del bebé o acostarlo en su cuna, pueden requerir de ayuda de otra persona de tu entera confianza.
Cuida tu alimentación
Procura llevar una dieta saludable y rica en fibra, además de ingerir mucha agua para mantenerte siempre hidratada. Cuidando tu alimentación podrás recuperar tu ritmo intestinal lo antes posible.
Camina lo más pronto posible
Es importante que intentes ponerte en pie lo más pronto posible para una pronta recuperación. Camina siempre del brazo de alguien y trata de hacerlo de la forma más erguida posible, recuerda que cuánto más recta se la postura que adoptes, más rápida será la recuperación.
Higiene diaria
Este es el cuidado más importante post- cesárea. Cuando tomes tu baño diario recuerda lavar bien la cicatriz con Jabón neutro y jabón, posteriormente seca muy bien con pequeños toquecitos y evita cubrir la herida con apósitos, a menos que sea una indicación médica.
Una vez que tu doctor haya retirado los puntos, puedes preguntarle sobre el uso de aceites hidratantes que te ayuden a una buena cicatrización y a eliminar la comezón que puedes llegar a sentir con la recuperación.
Utiliza ropa cómoda
Evita el uso de prendas ajustadas, con elásticos apretados o botones que puedan incomodarte, mejor opta por usar ropa holgada y vestidos anchos que aseguren tu comodidad en todo momento, así como zapatos abiertos o sandalias. Lo importante es evitar todo lo que requiera que te agaches para colocarlo o hagas algún esfuerzo innecesario.
Con estos consejos y la ayuda de tu especialista, verás que en poco tiempo te sentirás como nueva.