
Signos y síntomas.
Los niños por naturaleza son inquietos y quieren pasar la mayor parte del tiempo jugando, es por ello que no están exentos de sufrir un accidente, los golpes son los más comunes y si son en la cabeza, puede tener consecuencias graves. Los síntomas del traumatismo cerebral pueden ser leves, moderados o graves, dependiendo del grado del daño al cerebro. Algunos síntomas se hacen evidentes de inmediato, mientras que otros no aparecen hasta días o semanas después de la lesión. Una persona con traumatismo cerebral leve, puede permanecer consiente o puede permanecer inconsciente por algunos segundos o minutos. La persona puede sentirse aturdida o distinta a lo habitual por algunos días o semanas luego de la lesión inicial.
Otros síntomas.
En un traumatismo cerebral leve, también se puede presentar:
- Dolor de cabeza
- Confusión
- Desorientación
- Mareo
- Vista nublada u ojos cansados
- Zumbido en los oídos
- Fatiga
- Cambio en los patrones de sueño, de conducta o de estado anímico
- Problemas de memoria, concentración, atención o pensamiento.
Una persona con traumatismo cerebral moderado o grave puede presentar estos mismos síntomas, pero también puede padecer de un dolor de cabeza que empeora o no desaparece, vómitos repetidos o náuseas, convulsiones, derrame cerebral, incapacidad para despertar, dilatación de una o de ambas pupilas de los ojos, el habla entorpecida, debilidad o adormecimiento de las extremidades, falta de coordinación y/o un aumento de confusión, desasosiego o agitación.
Los niños pequeños con traumatismo cerebral moderado a grave, pueden presentar algunos de estos signos así como otros que se presentan específicamente en niños pequeños, tales como el llanto persistente, el desconsuelo, y/o el rechazo al amamantamiento o a la comida. Alguien con señales de traumatismo cerebral moderado o grave debe recibir atención médica a la mayor brevedad posible.